venerdì 12 settembre 2014

Quack

¿Les conté que comi pato en Francia?

Después de llorar un poquito me dije a mi misma que no había forma de no probar el pato sí lo tenía ahí en frente. Crucé los dedos para que no me gustara, supiera feo, tuviera textura asquerosa, lo que fuera con tal de que lo odiara. Cerré los ojos y me llevé un pedacito a la boca y.. Es el cielo. Es delicioso. Es suavecito, sabroso, jugoso, perfecto. 

Puedo ponerme a llorar mucho?

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