Día 11

Hoy conquistamos la parte antigua de Roma. Nos despertamos más tarde (era justo y necesario!) y salimos al Coliseo (morí de amor nuevamente). Dimos vueltas ahí y luego tomamos la inteligente decisión de pagar €9 extra para ir a la parte subterránea (la arena y luego la parte de abajo) y al tercer piso - morí de amor ocho veces más. (Recomendado a la mil. En serio) Ibamos con guía que no se limitó a hablarnos del tercer piso y lo subterráneo, sino que nos hablo en general, y lo hizo de manera no aburrida, dando información interesante y buena y de manera eficiente y entretenida. Épico. 

Con la entrada del Coliseo uno también puede entrar al Foro Romano y al Palatino (cierran la entrada a ambos lugares a las 6, tengan cuidado con eso!) pero habíamos quedado con Juanca de vernos a las 3 (eran ya las 3) en Eataly (el paraíso de la comida - un súper, tienda, librería, restaurante, etc de comida de unos cinco pisos), que queda a unas 3 paradas del metro. Terminamos llegando tipo 330, 4 (luego de bajarnos en una estación que no era y caminar un montón - no siempre confíen en Google Maps!) para darnos cuenta que el área de comidas lo cerraban a las 330 y volvían a abrirlo a las 7. Así que.. No. Nos devolvimos al área del coliseo, comimos ahí y nos fuimos hacia el Foro Romano. Caminamos un poco ahí, pero no pudimos verlo todo - nos cerraron el Palatino y luego eventualmente el Foro también. Salimos de ahí para ir a ver el Circo Máximo, tomarnos un café y volvimos al Coliseo para verlo de noche. 

Luego regresamos al hotel para cenar y alistar las valijas. Mañana: Florencia!