lunedì 1 settembre 2014

Día 10 - final

El final de mi aventura de espera no es uno tan feliz. El lugar donde estaba era efectivamente el lugar de salida de la Capilla Sixtina, mas no era el lugar por donde acordamos vernos. Después de una hora de esperar (ya ellos llevaban, según yo, 3 horas ahí) salí del Vaticano (sí, hice la fila para nada) y empecé a dirigirme hacia la salida propiamente del museo (al otro lado totalmente) cuando los vi a medio camino. Todos muertos de hambre, del calor y un poco conmocionados del amor por la Capilla Sixtina, fuimos en busca de algo de comer antes de ir (otra vez) a San Pietro. De camino había un viejito súper adorable, de esos que caminan con mini pasitos, y te toman del brazo para hablarte (eso también lo hacia mi nonna) recomendando el restaurante de su hermana. Bueno, a un viejito así de lindo no se le puede negar un almuerzo no? Fuimos, nos atendió un Raj, comimos oficialmente nuestra primera pasta italiana del viaje, y luego vino la hora de pagar. Para no entrar en detalles solo les digo que, como recomendación, no confíen en los viejitos lindos, ellos también pueden engañarlo a uno. Ah y como nota aparte, no es obligatorio pagar propina, sólo si se quiere. No se deje engañar por un Raj que le habla a uno en ocho idiomas distintos al mismo tiempo. 

Luego de que nos atracaran fuimos a hacer una fila interminable (y bajo el sol. Yay! -.-) para entrar a San Pietro. Estuvimos dando vueltas ahí  tomando fotos (la luz de ese lugar, por dios ❤️).

De ahí fuimos a hacer el recorrido oficial romano - Castel San Angelo, Piazza Navona, Pantheon, Fontana di Trevi (la están remodelando, mi corazón se rompió en pedazos) (ahí nos comimos un helado), Fontana di Tritone, Piazza della Reppubblica (vimos una limosina llegar al hotel mega caro de ahí y se bajó nada más y nada menos que una pareja de novios recién casados!) (pero el vestido estaba feo), Piazza Spagna (nos encontramos una billetera tirada de un croata - ya sin efectivo, obvio - por lo que fuimos a buscar algún policía o carabinieri) (vimos una propuesta de matrimonio - nos están persiguiendo hoy!) y luego nos fuimos de vuelta al hotel muertos (una parte del recorrido fue en metro (tenemos ilimitado, había que aprovechar!) pero la otra fue caminando). 





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